Los Premios Lazarillo fueron convocados por primera vez en el año 1958 por el ya extinguido Instituto Nacional del Libro Español (INLE) con el propósito de estimular la producción de álbumes ilustrados destinados al público infantil y juvenil.
Desde 1986 los convoca la Organización Española para eI Libro Infantil y Juvenil (OEPLI), con el patrocinio del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, en las modalidades de "Álbum Ilustrado" y "Creación literaria". Es, por tanto, el galardón más antiguo de la literatura infantil y juvenil que se concede en España y uno de los más prestigiosos en nuestro país y en Iberoamérica.
Este año, en la modalidad de "Creación literaria" se ha concedido el premio a la obra titulada "Rusgalía", de Andrea Maceiras, destacando que es "una obra bien urdida y entramada con un lenguaje poético con bellísimas escenas que te transportan a un mundo galáctico. Una apuesta a la imaginación desbordante y a la ciencia ficción".
En la modalidad de "Álbum Ilustrado" las premiadas han sido Paloma Corral y Begoña Oro con la obra titulada "Un fuego rojo", por "su originalidad, el trato del color con una rica paleta de grises en contraste con colores vivos, la composición de la doble página y la secuenciación de los personajes, así como una gran sensibilidad por la naturaleza".
Si quieres saber más acerca de los libros premiados, sigue leyendo:
Reseña de "Rusgalía"
Dot es un remoto planeta situado en los confines de la Galaxia Oma. Es el hogar de la pequeña y prodigiosa Quepi, que tiene el don de comunicarse con la naturaleza. Por recomendación de su abuelo Acasi, Quepi debe mantener su talento en secreto, recluida en una cabaña perdida en un bosque. La vida de Quepi, monótona y solitaria, cambia cuando un misterioso ser se cruza en su camino. A partir de entonces, Quepi arriesgará toda su existencia por perseguir a esa singular criatura. Junto a su hermano Udai, emprenderá un viaje que la llevará a recorrer la galaxia Oma y viajar más allá de los límites conocidos.
Reseña de "Un fuego rojo".
Un secreto es algo que nos consume, nos quema, nos sume en la más profunda soledad, la de no poder compartir lo que más nos importa, conmueve o hace sufrir.
¿Cómo poner palabras (e imágenes) a un secreto, a algo de lo que, por definición, no se puede hablar? La respuesta es sencilla: a través de una metáfora.
Un secreto es un fuego rojo. "Quien más quien menos, todo el mundo tiene un fuego rojo".
Lo tiene Prita y también sus hijos: Kelti y el pequeño Kup, los protagonistas de este álbum ilustrado que pretende ser esa imposible compañía para quien posee un secreto.
En esta historia, el lector encontrará la soledad, la incomprensión, la lucha estéril de los adultos por mantener a los niños al margen de los secretos, los intentos de confesión, la incomodidad de un entorno que a veces prefiere no ver, no saber, y por fin, un pequeño soplo sobre ese fuego, un alivio.
Fuente: OEPLI
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