Laura E. Kelly, consultora y experta en ámbito de la edición, ha realizado una divertida infografía con el objetivo de clasificar el “reino” de los lectores —como si del reino animal se tratara—, donde encontramos dos grandes clases: los amantes de los libros y otros lectores.
Dentro de los amantes de los libros la autora señala que hay tres grandes familias:
- El lector compulsivo, que a su vez puede subdividirse en aquellos que aman los libros como objetos, donde encontraríamos subespecies como el comprador compulsivo, el amante de la biblioteca, el lector cronológico, o el que nunca presta libros porque sabe que no se los devolverán o lo harán en pésimas condiciones; y los que abusan de los libros, donde figuran subcategorías como el “relector” —aquel que lee los mismos libros una y otra vez—, el rescatador de libros —que tiene guardadas cajas de libros usados que ha ido recuperando de diferentes sitios—, o el lector multitarea —que va alternando diferentes tipos de lectura a lo largo del día ya sean en casa, en el trabajo o en el metro.
- El lector situacional, donde encontramos además de tipos como el “omnilector” —aquel que lee todo lo que cae en sus manos—,el lector “de cuarto de baño”, o el lector “viajero” —que aprovecha los tiempos muertos de aeropuertos, estaciones o paradas de autobús para leer—, a usuarios muy involucrados con la lectura en pantalla como el lector “app feliz” al que solo le hace falta un poco de tiempo libre para descargar y comenzar a leer un libro en una aplicación de lectura en cualquiera de sus dispositivos, o el lector “Kindle”, quien a pesar de adorar el olor y el tacto de un libro impreso, se ha convencido de las ventajas de la lectura digital y se ha vuelto un adicto de este dispositivo. También dentro del lector situacional encontramos al lector social, donde hay diferentes tipos como el “lector de club” —que disfruta apuntándose a clubes de lectura—, o el lector “evangelizador” —que a veces puede ser un poco dogmático porque recomienda e incluso regala a sus conocidos copias de un título que le ha gustado para que lo lean.
- El lector inclasificable, donde encontramos subcategorías como el lector ecléctico —que lo mismo lee a Murakami que a Michael Conelly y es experto en literaturas poco conocidas— o el lector "complicado" —que rechaza pertenecer a un tipo porque además mezcla rasgos de diversas especies de lectores.
En la otra gran categoría, la de los "otros lectores", la autora presenta diferentes especies lectoras divididas en tres grandes familias:
- El lector por prestigio, donde encontramos, entre otros, al lector “profesional” —aquel que lee para escribir un artículo para una revista o para hacer una investigación—, al lector “de pega” —que presume de haber leído libros fundamentales como los siete volúmenes de En busca del tiempo perdido, pero realmente no lo ha hecho aunque sabe lo que debe decir de la obra—, o al lector “oscuro”, que lee libros de los que nunca has oído hablar.
- El lector “conflictivo”, al que pertenecen subclases como el lector reacio, que tras años escuchando lo maravilloso que es leer, finalmente se da cuenta que hay algo de cierto en ello; o el lector que no tiene tiempo para leer por los niños, el trabajo, el cansancio...
- El lector, o no lector, que odia los libros, donde figuran, por ejemplo, tipos como al que le encanta odiar leer, o el lector “censor”, que pide libros prestados solo para marcar las palabrotas que encuentra.
Fuente: Observatorio de la Lectura y el Libro, 5 de febrero de 2014
Todos estos tipos de lectores y no lectores, y muchos más, los puedes encontrar en esta simpática infografía. Haz clic para acceder:
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